Un país en zapatillas: Logroño y Valladolid

Cuando dormir cada noche en una ciudad no es un problema, sino una oportunidad de conocer nuevos sitios para correr

Una de las cosas que me ha enseñado esto de correr para mi vida diaria, es que hay que adaptarse a las circunstancias para hacer lo que realmente te gusta. Llueva, haga frío, calor, sea pronto o tarde, adaptamos nuestra vida para sacar ese rato para hacer lo que nos gusta, en mi caso correr. Esta semana debido a la carga de trabajo, he tenido que pasarla semana fuera de casa, y claro adaptar los viajes a mis entrenamientos. Aunque me gusta mirar en internet o goolge earth por donde correr, no dejo de hacer la pregunta en la recepción del hotel, "¿hay algún sito para correr por aquí?", y aquí es donde empieza una nueva aventura......

LOGROÑO.

Tras más de 4 horas en coche llego a Logroño, una ciudad marcada por el Camino de Santiago, los viñedos,las fábricas de conservas y zapatos, el buen vino y el mejor comer.

Decido soltar piernas antes de comer, la ruta para esta ciudad está decidida de antemano, seguir el cauce del Ebro hasta que toque volver. El día es espléndido, se nota que llega la primavera, el recorrido es idílico, mezcla de sol y sombra, puentes con sabor romano, parques amplios y bien cuidados, caminos marcados....unos de los mejores sitios en los que he corrido, y me gustará repetir algún día si puedo.

Supongo que el día tan bueno que me hizo acompaño a mi sensación de poder correr eternamente, de disfrutar de cada zancada, del correr hasta un punto sólo para verlo más cerca, de pararse para hacer una foto y compartirla en el blog.

Os dejo una cuantas fotos de Logroño y de mi nuevo "hobby" el "running-turismo", que es conocer las ciudades a golpe de zapatilla.

Logroño es un sitio precioso al que espero volver algún día....., y la calle Laurel también.....jejeje

VALLADOLID

La ruta semanal continuaba , esta vez a un sitio más conocido, Valladolid, donde había corrido la media en los años 2.007 y 2.008, por lo que la ciudad no me era tan desconocida. La idea era la misma, seguir el cauce del río, esta vez el Pisuerga. El recorrido no es tan bonito como el de Logroño, hay un paseo que invita a correr y te cruzas con algún corredor, pero lo que más te encuentras es gente mayor paseando o sentada en los bancos. El recorrido es un sube y baja continuo, tiene su parte bonita, pero Logroño había dejado el listón muy alto. Valladolid también tiene un carril bici que se puede coger, pero al igual que Logroño tener un paseo al lado del río hace para los "running-turistas" una bonita forma de conocer la ciudad sin perderse y con la referencia continua del río.

Tras el entreno, carreritas por el centro de la ciudad para recordar por donde nos lleva la media de Valladolid.

La gente sigue viendo con rareza que un "keniata pelirrojo" corra por su ciudad y con voz jadeante diga....."me hace una foto"......pero ya se acostumbrarán,.....bueno os dejo unas fotos de Valladolid.....